Células en misión
Por Robert Lay, www.celulas.com.br
Se dice comúnmente y con precisión que nuestro Dios es un Dios misionero. ¡Envió al primer misionero, Su Hijo!
Y luego Jesús envió a sus propios discípulos para hacer otros discípulos de todas las naciones, no para enseñarles teología y doctrina, sino para enseñarles a obedecer todas las cosas que ordenó a Sus primeros discípulos. Cada persona nacida de nuevo tiene que crecer hacia la madurez espiritual a través del discipulado y reproducirse ganando a otros no creyentes y ayudándoles a cambiar sus valores y obedecer al Rey. Pero no debemos detenernos allí. Necesitamos ayudarlos a vivir los valores del reino. Esta es la tarea que el Rey Jesús nos ha encomendado.
El nuevo odre mencionado por Jesús para contener el nuevo y fuerte vino de Su mensaje de salvación, es la vida comunitaria a través de la vida celular, o la vida corporal de Cristo. Este es el mejor lugar y los medios para ganar a los no creyentes y ayudarlos a obedecer y enseñarles todas las cosas que el Maestro nos ordenó.
Hay diferentes maneras de discipular a las personas. Pero siempre tiene que estar conectado con la vida corporal de Cristo. No hay tal cosa como un cristiano que “hace lo suyo” en el Nuevo Testamento.
La evangelización de la vida corporal es la forma más natural y efectiva para que un grupo celular crezca y se multiplique. Podríamos llamar a esto “Misiones en el hogar”. Las células son la mejor tierra de cultivo para plantadores de iglesias y misioneros en el país y en el extranjero. Esta ha sido nuestra experiencia. ¡Las iglesias que mantienen sus células conscientes de su llamado y deber misional see convertirán en bases efectivas de envío misionero!
Ayúdanos Dios!
Robert M. Lay
Movimiento Iglesia Celular Brasil